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¿Quién no ha probado unos buenos patacones? Ya sea solos o acompañando algún otro plato, siempre te dejan con ganas de comer más. Siendo ese, el mayor motivo, por el cual se le disfruta en todo el mundo.
Los patacones ecuatorianos y su invasión mundial
Los patacones ecuatorianos y su invasión mundial

El patacón en el mundo

Así como es afamado en Ecuador lo es en el resto del mundo, donde con algunas modificaciones ligeras, funge como un plato especial. Por ejemplo, en el caso de los Colombianos, es la compañia perfecta del pescado frito, queso, los huevos revueltos, carne, el guiso, suero u otros embutidos, e incluso, de la sal únicamente.

En este país llevaron su amor por el plato a otro nivel, desarrollando otros platillos a partir de los mismos, como la sopa de patacón.

Por su parte, en Costa Rica los patacones se consumen con regularidad desde la llegada del plato en algún punto anterior al siglo XX. empleados como acompañantes del arroz, frijoles o el ceviche.

En Panamá se modifica únicamente el nombre conociéndose como «tostón», o «frito» y consumiéndose a cualquier hora perfectamente, fungiendo tanto a modo de aperitivo como de plato fuerte, según el resto de los ingredientes.

Siendo exactamente igual en República Dominicana, donde reciben el mismo nombre. Acompañándose de carne, pollo o pescado fritos. 
Y finalmente, para los Venezolanos definitivamente es un emblema gastronómico, especialmente en el caso de los Zulianos, quienes lo distribuyen en todo tipo de locales de comida, desde los quioscos hasta restaurantes formales; incluyendo en cada una de sus comidas.

¿Sabías que...?

La palabra «patacón» proviene de «batakká», palabra árabe con la que se hacía referencia a las monedas, cuya traducción al Italiano dejó la palabra «patácca», hasta que tras pasar de boca en boca, quedó como «patacón», simbolizando este plato oriundo de la Musa Paradisiaca.

Consumirlo, trae consigo la adquisición de vitamina A y C, así como fósforo, péctina y fibra.