
Historia
La historia de las Chugchucaras realmente no es tan larga, principalmente al estar bastante clara, a comparación con los orígenes de otros platos que también están presentes en la gastronomía Ecuatoriana. Esta indica, que vio la luz metafóricamente hablando en la serranía; específicamente en Latacunga, una ciudad ubicada en la provincia de Cotopaxi, Ecuador. Lugar donde sigue siendo una de las recetas favoritas en todo el año.
Es en esta pequeña ciudad privilegiadamente ubicada, que un hombre identificado como Hugo Córdoba, preparó este plato en el restaurante donde fungía como cocinero y encargado.
Empleando para ello, unas papas, plátano maduro, maíz tostado, mote, ají, unas empanadas, canguil y cerdo frito incluyendo la corteza crujiente del mismo; pimientos picantes, cilantro, tomates y cebollas troceadas y convertidas en salsa.
Después de eso, la historia se vuelve menos específica, dando a entender que logró diseminarse por el resto de las provincias, hasta ser famosa en todo el país.
Curiosidades
Su nombre tan peculiar se debe a una palabra quichua que se traduce como «cuero tembloroso», haciendo alusión al cerdo, que es uno de sus ingredientes principales. Algunos dicen que el motivo por el cual se originó la Chugchucara, en Latacunga, es porque a esta zona llegan distintos productos exportados y los que no, se generan allí, todo debido a su conveniente ubicación.
Consumirlo es beneficioso para la salud, al poseer distintas vitaminas, como la B1, B3, B6 y C. Así como minerales, entre los cuales destacan el fósforo, hierro, magnesio y potasio. También presenta ácido pantoténico, folato y riboflavina.